La permacultura es toda una filosofía de vida sostenible. Se basa en observar la naturaleza e imitar el funcionamiento de los ecosistemas. Su objetivo es cubrir las necesidades del presente sin poner en peligro el futuro.La permacultura se ha demostrado como una opción eficaz para una agricultura sostenible y respetuosa con el entorno. En vez del monocultivo extensivo, se trata de combinar la plantación de diversas verduras y hortalizas en las condiciones más adecuadas y de esta manera obtener una cosecha sana y que al final el terreno no se vea alterado.
El concepto de permacultura surgió vinculado a la agricultura. Se trata de una visión integral, que tiene en cuenta no sólo elementos aislados sino cómo se relacionan entre ellos. La base de la permacultura se encuentra en la observación de la propia naturaleza y de los diversos ecosistemas, en los que unos seres benefician a otros y es el conjunto el que garantiza el desarrollo, el equilibrio y la supervivencia. Y se aplica imitando estos modelos para cultivar alimentos.
El concepto de permacultura surgió vinculado a la agricultura. Se trata de una visión integral, que tiene en cuenta no sólo elementos aislados sino cómo se relacionan entre ellos. La base de la permacultura se encuentra en la observación de la propia naturaleza y de los diversos ecosistemas, en los que unos seres benefician a otros y es el conjunto el que garantiza el desarrollo, el equilibrio y la supervivencia. Y se aplica imitando estos modelos para cultivar alimentos.
Los principios de la permacultura.
La permacultura se basa en tres grandes principios éticos:
Cuidar de la tierra, teniendo en cuenta todas las especies, más allá de su valor para las personas.
Cuidar de las personas, respetando sus derechos, con ayuda mutua y considerando también los valores no materiales.
Repartición justa entre las personas y las especies, con límites al consumo y devolviendo a los ecosistemas los excedentes y residuos para regenerar la tierra.
En este ensayo, explicaremos cómo generar el conocimiento y la aplicación de la permacultura como modelo de desarrollo sostenible en los centros educativos.
Desarrollo.
La Organización de las Naciones Unidas se han esforzado, durante lo que va del siglo XXI, por promover las prácticas amigables con el medio ambiente. La Agenda 2030, formulada en 2015, estableció 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que, entre sus principales objetivos, señala la necesidad de proteger los ecosistemas y frenar la destrucción de los mismos. En este sentido, la permacultura, sin duda, juega un papel muy importante en el diseño de proyectos y estrategias sustentables.
En este sentido la permacultura es un enfoque de diseño que busca crear sistemas sostenibles que sean beneficiosos tanto para la naturaleza como para las personas. Es un modelo integral que abarca una amplia gama de temas, desde la agricultura y la energía, hasta la vivienda y la educación. En un mundo cada vez más preocupado por el cambio climático y la degradación medioambiental, la permacultura se presenta como una alternativa viable y necesaria.
Algunas de las acciones que se pueden realizar son;
-Incorporar la permacultura en los planes de estudio: Una forma efectiva de fomentar el conocimiento y la aplicación de la permacultura en los centros educativos es incluirlo como contenido en los planes de estudio. Esto permitirá que los estudiantes aprendan sobre los principios y las prácticas permaculturales desde una edad temprana, promoviendo una mentalidad sostenible desde el comienzo de su educación.
-Crear espacios permaculturales en las escuelas: Otra forma de promover la permacultura en los centros educativos es implementar espacios permaculturales en las escuelas. Estos espacios podrían ser huertos escolares o jardines con enfoque permacultural, donde los estudiantes puedan aprender y aplicar los principios permaculturales en la práctica. Esto les permitirá experimentar de primera mano los beneficios de la permacultura y fomentará su participación activa en su propio aprendizaje.
-Fomentar la formación docente en permacultura: Es crucial asegurar que los docentes tengan los conocimientos y las habilidades necesarias para enseñar sobre la permacultura. Esto puede lograrse mediante la oferta de programas de formación en permacultura para docentes, donde puedan adquirir las herramientas necesarias para impartir estas enseñanzas de manera efectiva.
-Promover la educación experiencial: La permacultura se basa en la acción y la experiencia práctica. Por lo tanto, es importante fomentar la educación experiencial en los centros educativos, donde los estudiantes puedan aplicar los conceptos permaculturales en situaciones reales. Esto podría incluir excursiones a granjas permaculturales, proyectos de diseño permacultural en el entorno escolar o proyectos de servicio comunitario relacionados con la permacultura.
La permacultura se basa en principios éticos que incluyen el cuidado de la Tierra y el cuidado de las personas . Para fomentar el conocimiento y la aplicación de la permacultura, es crucial promover la educación en todos los niveles, desde cursos y talleres hasta programas de capacitación. La difusión de la permacultura se ha facilitado gracias al avance de la tecnología y las redes de comunicación, lo que ha permitido que el conocimiento permacultural llegue a un público más amplio a través de plataformas en línea, blogs y redes sociales.
La aplicación de la permacultura abarca diferentes aspectos, como la agricultura, la arquitectura, la energía, el agua y la gestión de residuos. En la agricultura, se promueve el uso de técnicas agroecológicas y el cuidado del suelo para mantener la fertilidad a largo plazo y reducir la dependencia de agroquímicos. En la arquitectura, la permacultura se aplica en el diseño de edificaciones energéticamente eficientes, que utilizan materiales locales y se integran en el entorno natural de manera armónica. La captación y el uso eficiente del agua, así como la gestión adecuada de los residuos, también son aspectos clave de la permacultura.
La permacultura no solo tiene beneficios ambientales, sino también sociales y económicos. Fomenta la participación comunitaria, la resiliencia local y la seguridad alimentaria. Los sistemas permaculturales pueden generar empleo y fortalecer las economías locales al promover la producción de alimentos y productos de manera sostenible. Al reducir la dependencia de recursos externos y minimizar los costos de energía y transporte, la permacultura contribuye a la autonomía y autogestión de las comunidades. No obstante, existen desafíos para la difusión y aplicación de la permacultura. Entre ellos se encuentran la falta de conciencia y comprensión sobre la permacultura, la resistencia al cambio, la falta de recursos y apoyo institucional, y las barreras legales y regulatorias. Para superar estos desafíos, es importante promover políticas y regulaciones favorables, así como fomentar la sensibilización y educación sobre la permacultura.
Conclusión.
La permacultura ofrece un enfoque integral y sostenible para abordar los desafíos ambientales y sociales que enfrentamos en la actualidad. Promover el conocimiento y la aplicación de la permacultura en los centros educativos es fundamental para fomentar un cambio positivo en las futuras generaciones. Al incorporar la permacultura en los planes de estudio, crear espacios permaculturales en las escuelas, fomentar la formación docente en permacultura y promover la educación experiencial, estaremos brindando a los estudiantes las herramientas necesarias para construir un futuro más sostenible.
La permacultura como modelo de desarrollo sostenible tiene el potencial de transformar nuestro mundo en uno más equilibrado y respetuoso con la naturaleza. Para generar conocimiento y aplicación de la permacultura en los centros educativos, es fundamental incorporar en los planes de estudio, crear espacios permaculturales, formar a los docentes en permacultura, promover la educación experiencial, fomentar la colaboración con la comunidad y utilizar las tecnologías de la información y la comunicación. Al hacerlo, estaremos contribuyendo a la formación de ciudadanos conscientes y comprometidos con la sostenibilidad, que serán capaces de diseñar y desarrollar sistemas regenerativos y resilientes para un futuro mejor.
En conclusión, la permacultura es un modelo de desarrollo sostenible que busca la armonía entre el ser humano y la naturaleza. Su conocimiento y aplicación se generan a través de la educación y la investigación, así como de la colaboración entre diversos actores. La permacultura se aplica en diferentes campos y tiene beneficios ambientales, sociales y económicos. Sin embargo, es necesario adaptarla a cada contexto y superar los desafíos existentes para lograr su implementación exitosa como modelo de desarrollo sostenible.
Referencias Bibliográficas
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Permacultura: una opción para el desarrollo sostenible (ecosiglos.com)
Permacultura: aprender de la naturaleza para una vida sostenible. Recuperado de:
Permacultura: aprender de la naturaleza para una vida sostenible (bbva.com)
Permacultura: qué es y cómo se aplica en la actualidad. Recuperado de:
Cómo generar el conocimiento y la aplicación de la permacultura como modelo de desarrollo sostenible - Búsqueda (bing.com)
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